Berberechos al vapor, la manera más simple de disfrutar de estos bivalvos. Hay quien le añade un poco de agua, vino blanco o un gajo de limón a la cocción. Para nosotros, los berberechos al vapor perfectos son eso, al vapor, sin ningún añadido más.
Los berberechos que vendemos en Sal y Laurel, no los tienes que dejar en agua salada, ya vienen perfectamente depurados y sin arena.
Pon una cazuela al fuego y pon este al máximo. Cuando veas que empieza a estar caliente la cazuela, pon los berberechos y tapa la cazuela. Te recomendamos que la tapa sea cristal para ver perfectamente cuando se empiezan a abrir.
Los berberechos al vapor perfectos se retiran justo cuando se abren. Este proceso no es exacto, ya que algunos tardan más que otros, espera a que abran todos pero no los dejes más tiempo, si no se harán demasiado y se perderían ciertas texturas del berberecho.
Cómelos antes de que se enfríen y sin limón.
Hay a quien le gustan más hechos, pero se pierden texturas y parte del característico sabor yodado, quedando como los berberechos en conserva.
Si hay alguien a quien le gusta echarles limón, que pregunte antes de ponerle a todos los berberechos, le puede fastidiar el aperitivo al resto ;)
Por último, os ponemos esta curiosa manera de hacer unos berberechos al vapor exprés de los chicos de Abastos 2.0, donde os recomendamos encarecidamente que vayáis cuando visitéis Santiago de Compostela.
